Misionera de OCASHA.
Por fín he llegado a Jimaní, el que va a ser mi destino por los próximos tres años.
Hemos estado antes unas semanas visitando a los compañeros de Ocasha-CCS que en están en Dominicana. Estuvimos unos cinco días en Sabaneta, visitando las comunidades de las Lomas a las que sólo se tiene acceso a pie o en mulo. Son casitas repartidas por todo el territorio, pero se agrupan en varias comunidades. Estas personas viven en casas muy humildes con apenas dos habitaciones en donde duermen todos. Al lado tienen una casita mucho más pequeña y sencilla que utilizan de cocina y justo detrás de la casa, la letrina. Estuvimos unos días por la loma realizando Celebraciones de la Palabra y acompañando a los grupos de mujeres en su programa de economía solidaria. Tengo que reconocer que me impresionó lo acogedores que son tanto el pueblo dominicano como el haitiano, apenas tienen nada para vivir, comen una o dos veces al día un moro de guandules y arroz, pero todos nos ofrecían comida y el cafetito con jengibre. Sigue leyendo la carta de Inma.