Eustaquio Camacho, Delegado Diocesano Pastoral Vocacional. Damián Diaz, Director Diocesano de OMP.
La
Conferencia Episcopal Española ha acordado que de ahora en adelante se celebre
conjuntamente el mismo día, IV Domingo de Pascua, Festividad del Buen Pastor,
la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y la Jornada de las Vocaciones
Nativas que promueve la Pontificia Obra de San Pedro Apóstol.
Feliz
decisión, porque una no menoscaba a la otra, sino que se complementan:
Agradecemos a Dios el regalo de la Vocación a la vida sacerdotal y religiosa en
su Iglesia. Y continuamos pidiendo que surjan también hoy jóvenes vocaciones en
las distintas comunidades cristianas. Al tiempo que esperamos la generosa
respuesta de los llamados.
Y es justo
en este punto donde las jóvenes comunidades cristianas de los países de Misión
nos dan un testimonio que puede ser fecundo en nuestras Iglesias de antigua
cristiandad: Chicos y chicas que experimentan sobre sí la mirada apasionada de
Jesús, que sienten con El la pasión por el Evangelio, y que desde la compasión
por su Pueblo responden con ilusión y generosidad.
Y nosotros,
además de orar por las vocaciones, desde el agradecimiento por el testimonio y
la responsabilidad, porque no se pierda ni una de las vocaciones que Dios
suscita y que se ve correspondida, colaboramos también económicamente a la
formación de los Seminarios y Noviciados de los países de Misión.






