Damián Diaz. Delegado diocesano de Misiones de Ciudad Real.
La participación en las tareas evangelizadoras y la corresponsabilidad en el funcionamiento de la comunidad ha sido, es y será una constante en las Misiones. Por vocación y convicción, y por necesidad.
La incorporación a la dirección de las comunidades, a sus distintas
actividades, y a la proclamación de la Palabra, como Catequistas, Líderes,
Consejeros, etc. es una necesidad cuando la presencia del sacerdote o misionero
es imposible en los amplios territorios evangelizados en tierras de Misión.
Pero además esto se ha venido realizando de manera natural, espontánea,
la que nace de saberse no propietario del Evangelio o de la Iglesia, sino
Enviado para implantar una comunidad que luego debe tener su vida propia, y a
la que hay que dotar cuanto antes de los recursos personales y (si fuera
posible) materiales necesarios.
Los Catequistas Nativos
participan de esta “Sinodalidad”, pero necesitan formación.
Nuestros sacerdotes diocesanos del Instituto
Español de Misiones Extranjeras se incorporan a esta corriente sinodal
misionera, y son guía y luz en los tres grandes continentes, y modelo y ejemplo
también para nosotros, animándonos a participar, junto con ellos, en la tarea
de la Evangelización Universal de la Iglesia.
Que no les falte el apoyo a nuestros compañeros. Es otra manera
especial de participar nosotros también en esta Sinodalidad.
Un saludo
fraterno.
Damián.