P. Manuel Gallego. Bamako. Mali
Queridos familiares y amigos: qué tal habéis comenzado el 2013?
Algunos de
vosotros en las felicitaciones de Navidad me preguntáis sobre la situación en
Mali y cómo vive la gente?
Ya sabéis que el golpe de estado del 22 de marzo 2012 y la ocupación del
Norte de Mali por grupos islamistas ha tenido un efecto muy negativo a nivel
internacional; lo que ha ocasionado una gran inquietud y el consiguiente
deterioro de toda la economía maliense: caída del turismo, suspensión de
congresos y viajes de negocios, cerramientos de hoteles y restaurantes,
expatriados que abandonan el país, perturbaciones a nivel de la agricultura,
del comercio, de la artesanía, etc.
El otro día había un artículo en la prensa que decía que el 20% de las fábricas
de la capital habían cerrado y el 60 % recurren al paro técnico; la tasa del
paro es del 17,3 % según el Instituto
Nacional de Estadísticas (INSTAT)
Mucha gente ha perdido su puesto de trabajo y los que estaban bien
colocados y ganaban bastante, ahora tienen que conformarse con “sueldos a la
maliense” (entre 50 y 100 € por mes); es el caso de la gente que trabajaba con
cooperantes y organismos.