Damian Diaz. Delegado de Misiones
Para esto, viene insistiendo en aquello que ya
los Papas anteriores, sobre todo Juan Pablo II, habían proclamado: Que la Misión ad Gentes es paradigma de toda la
acción evangelizadora de la Iglesia.
Y en este sentido, Francisco ha querido también
aprovechar un feliz aniversario, para “volver a encender el ardor y la pasión
por la misión de Jesús”: Llevar el Evangelio a todos los hombres de todos los
tiempos y de todas las culturas. Este aniversario es el centenario de la
Encíclica “Maximum Illud”, de
Benedicto XV.
¿Por qué la importancia de esta centenaria
encíclica? Pues porque en un mundo destrozado y desmoralizado a causa de la
primera Guerra Mundial, aquel Papa vio la necesidad de reavivar el decaído
fervor misionero, recordando que la tarea más importante de los cristianos
(“aquello máximo”), de la Iglesia de Jesucristo, es el anuncio del Evangelio,
y, sobre todo, que “la misión puede
renovar la Iglesia”.
Considerando ahora el Papa Francisco que estamos
igualmente en un mundo bastante desmoralizado, que ha perdido sus más
importantes valores, quiere aprovechar este aniversario para proponer a la
Iglesia la celebración de un Mes
Misionero Extraordinario, con tres objetivos fundamentales:
- “En
primer lugar, nos invita a renovar la misión como compromiso bautismal de todos
los fieles sin dejar o delegar en los institutos misioneros esta dimensión
fundamental de la fe de todo el Pueblo de Dios.
- En
segundo lugar, la misión debe convertirse en el paradigma de la vida ordinaria
y de toda acción de la Iglesia y,
- Por
último, se pide a todos los cristianos de sus diócesis, parroquias, movimientos
y grupos eclesiales que se constituyan en estado permanente de misión.”
Y propone vivir cuatro dimensiones importantes:
1. Encuentro personal con Jesucristo, vivo
en su Iglesia: Eucaristía, Palabra de Dios, oración personal y comunitaria.
2. Testimonio: santos, mártires de la
misión y confesores de la fe, que son expresión de las Iglesias repartidas por
el mundo entero.
3. Formación: bíblica, catequética,
espiritual y teológica sobre la missio ad gentes.
4. Caridad misionera: como apoyo material
para el inmenso trabajo de evangelización, de la missio ad gentes y de la
formación cristiana de las Iglesias más necesitadas.
En nuestra Diócesis de Ciudad Real, hemos
previsto los siguientes actos:
- La inauguración del Mes Misionero
Extraordinario será una Misa el 1 de octubre en el Convento de Carmelitas de
Ciudad Real, a las 7 de la tarde, presidida por el Sr. Obispo. Los sacerdotes
que vengáis a concelebrar traed alba y estola blanca, por favor.
- Una exposición misionera itinerante se
llevará a ocho parroquias a razón de una semana por parroquia, allí donde hay
Grupos de Animación Misionera.
- Iremos
publicando testimonios de nuestros
misioneros en el blog de la Delegación de Misiones cada día del mes de octubre
2019.
- El
sábado 12 de octubre, vamos a realizar una Marcha
Misionera con los jóvenes, en colaboración con la Delegación de Jóvenes de
la Diócesis. Adjuntamos a esta comunicación la convocatoria y las fichas de
inscripción para la Marcha.
- Y el 19 de octubre, víspera del Domund,
fecha prevista por la Delegación de Catequesis para el envío diocesano de
catequistas, invitaremos a todas las Delegaciones Diocesanas, así como a las
parroquias, a convocar a sus agentes, voluntarios, etc., a un gran Envío en la catedral por nuestro Obispo
D. Gerardo. Traed también alba y estola los sacerdotes, por favor.
- A
través del correo electrónico de la Diócesis, os hemos enviado algunos temas de formación para quien quiera
utilizarlas en las reuniones de Formación permanente de sus parroquias el
próximo curso.
- Asimismo,
hemos enviado por el mismo medio un subsidio para que podáis incluir una petición misionera en las preces de la
Misa de cada día.
- Finalmente,
enviamos también las hojas del Octubre
Misionero, para que quien quiera las proporcione cada semana a los fieles
de su parroquia, de manera que cada semana del mes de octubre se viva una
intención misionera.
El Mes Misionero Extraordinario, así como el
centenario que lo ha propiciado, es, sin duda, un momento de gracia, y desde la
Delegación Diocesana de Misiones queremos ayudar a nuestras comunidades
parroquiales a aprovecharlo para hacerle rendir sus mejores frutos.
A vuestra disposición.