Toda
la humanidad sufre y gime
o por
falta de Dios,
o
por aturdimiento interior,
o
por ahogo en un oscuro malvivir,
o
por extravío y descontento,
o
por miserias lacerantes
y
dolores agudísimos
que
tocan a los individuos, familias y pueblos
en
las necesidades más esenciales.
Que
cada uno se vuelva obrero donde esté.
que
cada uno se incline
sobre
el corazón y el cuerpo
del
propio hermano
de
aquellos que Dios le confía.
Que
cada uno esté pronto a correr
adonde
Dios le mande.
Andrea
Santoro
Misionero
italiano asesinado en Turquía en 2006