Segundo premio YO
SOY UNO DE ELLOS
El día que
llegué a este planeta fue el final de un largo viaje con mis padres, en el que
la mitad del tiempo estuve dormido. Sólo recuerdo la salida del cohete de la
base espacial de la Tierra y como me dormían junto a los niños de otras
familias.
Me hacía
mucha ilusión ser los primeros en llegar al mundo nuevo, pero también me daba
miedo no saber lo que allí me esperaba. MI mamá me calmaba diciéndome que con
nosotros siempre iba Dios para ayudarnos en nuestra vida.
El lugar era
muy extrañó e interesante a la vez, con
paisajes y plantas extrañas. Había mucho trabajo que hacer.
Pero lo
mejor fue encontrarnos con los habitantes de aquel lugar, unos seres muy raros,
con varios ojos, piel de color violeta, antenas en las orejas y 10 dedos en
cada mano.
Me di cuenta
que algunos de ellos eran como yo, querían jugar y nos miraban con curiosidad.
MI padre me animó a que me acercara a ellos y les enseñara cómo nos
divertíamos. Compartí mis juegos, yo les enseñe cosas a ellos y ellos a mi, les
cogí cariño y siempre estaba dispuesto a ayudarles, has que aprendí su idioma.
Un día me
preguntaron cómo podía estar tan feliz y con tantas ganas de jugar, yo les
hablé de las enseñanzas de mis padres , y de
las de mi otro Gran Padre: Dios.